Naciones de Melanesia: Papúa Nueva Guinea, Salomón, Vanuatu y Nueva Caledonia. También la República de Fiji (Fiyi) se considera dentro de Melanesia, (aunque está relacionada con Polinesia).
-Adaro: Los Adaro son
malvados espíritus marinos que forman parte de la mitología de las Islas
Salomón. Se los consideraba una
representación del aspecto malvado del espíritu de los muertos; tienen cuerpo
humano, branquias detrás de las orejas, aletas en lugar de pies, una aleta
dorsal y una lanza en su cabeza como la de un pez espada.
Se dice que los Adaro viven en el
Sol y viajan a la Tierra deslizándose por los arcoíris. También viajan en los chorros de agua o
cuando llueve con sol. Los Adaro
resultan peligrosos para los humanos y matan disparando peces voladores
envenenados, que dirigen a la nuca de sus enemigos. Su líder recibe el nombre de Ngorieru, y al
parecer vive en las costas de la isla San Cristóbal (Makira).
Las canoas que pasan por sus
guaridas usan sus remos sin hacer ruido, y las personas hablan en voz baja para
no atraer su atención.
Los Adaro visitan a los hombres
en sus sueños para enseñarles canciones y danzas.
(Fuente: "La Biblia de las Criaturas Míticas", Brenda Rosen)
-Dakuwanga: Dakuwanga es un
dios de las islas Fiji, que cuenta la historia de un hombre que se transforma
en un dios.
Dakuwanga era un hombre
justo. El día que murió, se cuenta que
fue a nadar al mar, se transformó en serpiente gigante y después en un tiburón
gigante, parecido al megalodón, pero aún más grande. Regresó a saludar un año después, volvió al
mar y desde ahí protege a los buenos y castiga a los malos. Algunos científicos piensan que pudo ser un tiburón
toro, exagerado en tamaño por los nativos.
(Fuente: Wikipedia)
-La Sirena de Fiji: También
conocida como la Sirena de Barnum, ha sido uno de los mayores fraudes en la
historia de los críptidos. En
1842 el empresario circense Phineas Taylor Barnum, adquirió, lo que decía ser
él, una auténtica sirena capturada en las cercanías de las Islas Fiji, pero la
sirena resultó ser un pequeña y monstruosa criatura momificada, (nada más lejos
de lo que la gente imagina como una verdadera y espléndida sirena).
A pesar de que el pintoresco
espécimen fue asociado a las islas Fiji, resultó que este tipo de “souvenir”
tenía su origen en Japón, donde pescadores creaban artesanalmente estas sirenas
uniendo la mitad superior de un mono cosida con la mitad inferior de un pez,
con tal maestría que era difícil detectar las costuras, para luego someterlas a
un proceso de disecado, donde quedaban con ese efecto de momificación y listas
para ser vendidas como auténticas sirenas a extranjeros que visitaban sus parajes. En un principio, durante el período Edo en Japón, estas sirenas fueron exhibidas en unas ferias de variedades ambulantes llamadas Misemono.
Fuentes:
www.gabehash.com
Sirena en Micronesia
Estados Independientes: Palaos, Estados Federados de Micronesia, Islas Marshall, Naurú, Kiribati.
Dependencias de Estados Unidos de América: Guam, Wake, Islas Marianas del Norte.
-La Sirena de Guam: La sirena
de Guam fue una jovencita, que vivía en Agana, cerca del río Minondo, en
tiempos de la colonización española. A
ella le fascinaba el agua más que cualquier otra cosa y usaba todo su tiempo
libre para nadar en el mar o en el río.
Un día su madre le pidió recolectar unos cocos para la comida, pero la
joven se distrajo y se la pasó todo el día nadando. Cuando la madre fue en su búsqueda,
impaciente por la demora, en compañía de su abuela (en otras versiones dicen
que, junto a su madrina) en un momento de ira sentenció: “Si te gusta nadar
tanto, deberías convertirte en un pez”, lo que en ese preciso momento comenzó a
ocurrir aceleradamente, por lo que su abuela intervino en forma precipitada diciendo:
“pero deberás seguir siendo medio-humana”.
De esta forma la chica se transformó en sirena.
Luego de pronunciar aquellas
palabras, que resultaron ser como una maldición, la madre se arrepintió de lo
dicho, pero el daño ya estaba hecho y la chica se despidió de su familia para
quedarse por siempre en el mar.
Aún en nuestros tiempos la gente
de Guam dice haber avistado a Sirena por sus costas y su folclor nos cuenta que
la única forma de atraparla sería con una red hecha de cabellos humanos.
(Fuente: www.realmermaids.net)
Sirena en Polinesia
(Land of Enchantment, fanstaygalleryart.com)
Conformada por:
Nueva Zelanda, archipiélago de Tukelau, Islas Cook y Niue (Nueva Zelanda);
Polinesia Francesa (Tahití, Islas Marquesas, Islas Tuamotu, etc.);
Tuvalu; Tonga; Samoa;
Fénix y De La Línea (Kiribati)
Hawái y Samoa Americana (Estados Unidos);
Pitcairn (Reino Unido);
Isla de Pascua (Chile).
Hawai
-Hina-ika: Es una diosa a
la que se le considera madre de la isla de Molokai. Su nombre se traduce como “Madre de las
Aguas”. Ella fabricaba un tejido sagrado
confeccionado con corteza de árbol y enseñaba a los hombres y mujeres a
respetar su entorno para que éste fuese condescendiente con ellos.
Hina es la madre del héroe
polinésico Maui.
-Tortuga Marina: En el
antiguo Hawái, la tortuga era considerada una manifestación del “Dios Creador”,
y comerla era una forma de conectar con esa fuerza creadora.
La mayor de todas las tortugas
nadadoras es la “Tortuga verde hawaiana”.
Aquellas familias que
reverenciaban a la tortuga como una deidad personal o un tótem animal
tenían especial cuidado en no causarles daño, y mucho menos comerlas. Las leyendas hawaianas hablan de una tortuga
capaz de transformarse en humano si necesitaba acudir a ayudar a los niños que
jugaban al borde del océano.
-Ukupanipo: En la mitología
hawaiana, Ukupanipo es un dios-tiburón que controla la cantidad de pescado
suficiente para el pescador.
De vez en cuando adopta a un niño
humano que se gana el poder de transformarse en un tiburón. (Fuente: Wikipedia)
Nueva Zelanda
-Marakihau: Figura
estilizada utilizada en las tallas maoríes, híbrido entre un hombre y un pez,
que representa, valga la redundancia, a un hombre-pez o a una sirena.
(Fuente e imagen: "Procesos de Cambio y Adaptación en la Estética Maorí", tesis de Francisco Munuera W.)
-Tangaloa: Es el dios del
mar (también llamado Takaroa), uno de los grandes dioses maoríes. Tangaloa es el padre de muchas criaturas
marinas. Su hijo, Punga, tiene dos
hijos, Ikatere, el ancestro de los peces y Tu-te-wehiwehi, el ancestro de los
reptiles. (Fuente: Wikipedia)
-Taniwha: En la mitología
maorí, Taniwha, son seres con forma de serpiente (considerados por los foráneos
como una especie de dragón) que viven en pozas profundas, ríos, cuevas oscuras,
o en el mar, especialmente en lugares con corrientes peligrosas. Ellos pueden ser altamente respetados como
guardianes de personas y lugares, o en algunas tradiciones como seres
peligrosos, abusivos, que, por ejemplo, secuestraban mujeres para tenerlas como
esposas. (Fuente: Wikipedia)
-Pania de los Arrecifes: De
acuerdo con una de las varias versiones de una vieja leyenda maorí, la sirena
Pania vivió en el mar frente a la costa de la Isla Norte de Nueva Zelanda. Un día ella se enamoró y se casó en secreto
con Karitoki, el hijo de un jefe maorí, viviendo con él en la noche y en el mar
con su gente durante el día.
Cuando Karitoki trató de hacerla
permanentemente humana, colocando un trozo de comida cocinada en su boca
mientras dormía (por consejo del anciano sabio de su comunidad), Pania huyó al
mar para nunca más volver.
Ahora cuando la gente mira
profundamente el agua sobre el arrecife, algunos dicen que se puede ver a Pania
con los brazos extendidos esperando a su antiguo amante. No se sabe si está implorando que le explique
su traición o expresando su continuo amor.
Pania y Karitoki tuvieron un hijo
llamado Maremare, un Taniwha, quién protege el arrecife y el mar frente a
Napier y que a menudo se disfraza como tiburón, raya o pulpo.
(Fuentes: Wikipedia y mermaidsofearth.com)
Tahití
-Tiburón: En Tahití la
población rendía culto a toda suerte de peces, entre ellos a los tiburones,
considerados como los mensajeros de los dioses o como los representantes del
espíritu de los marinos desaparecidos.
Cuando los tiburones se vinculaban a una familia, sus miembros ya no
tenían nada que temer de ellos. Al
contrario, si alguna desgracia les ocurría en el mar, aquéllos salían a
auxiliarlos y los traían cargados sobre el lomo. Así los tiburones llegaron a ser héroes de
numerosas leyendas.
(Fuente: "Leyendas del Mar", Bernard Clavel)
Te Pito o Te
Henua
(Rapa Nui/ Isla de Pascua)
-Tangata-ika: Isla de
Pascua es indudablemente archiconocida por sus colosales esculturas de piedra
llamadas Moai, sin embargo existieron también tallas a menor escala en madera y
piedra. Una de estas estatuillas más
pequeñas es el Tangata-ika, interpretada por algunos estudiosos como un mítico
Hombre-pez (Tangata-ika), sin embargo, otros eruditos les llaman Tangata-moko,
o sea, Hombre-lagarto.
A continuación, les dejo algunas
imágenes de estas enigmáticas figuras:
(Fuente: "Enigmas: Civilizaciones Perdidas, Malditas y Olvidadas", editorial Dastin S. L.
"Mito y Realidad de Rapanui: La Cultura de la Isla de Pascua", Ramón Campbell.
"Île de Pâques, Mystérieux Moko", Jean Hervé Daude)
-Tangaroa: Esta divinidad
no es exclusiva de Isla de Pascua, como ya vimos, en otros puntos de polinesia
se le conoce como Tangaloa y hay gran variedad (y variantes) de mitos en torno
a él.
A continuación expongo 2
versiones de una misma historia del dios Tangaroa en Isla de Pascua, en una
adquiere la forma de una foca y en la otra la de un león marino (lobo marino),
lo que me hizo recordar por un lado la leyenda de las selkies (gente foca) de
Escocia y la del
Millalobo en Chiloé, pero esto es sólo una mera apreciación
mía.
Ko Tangaroa
(“Leyendas de
Isla de Pascua”, Padre Sebastián Englert,
Referido por
Santiago Pakarati)
Había un ser divino, el Gigante
(Teko), y otro que era Tangaroa.
Entre ellos hubo una disputa
porque Tangaroa quería venir aquí, a Te Pito o Te Henua. El Gigante le dijo: “No vayas, no llegarás
allá; no sabes cuántos días necesitas para llegar; te mueres en el camino”.
Tangaroa no le hizo caso, salió
para venir acá.
A los cuatro días vio el Gigante
que no estaba Tangaroa, Moe ava, el hijo del Gigante le dijo: “Tangaroa se ha
ido por el mar a una isla”.
El Gigante sintió lástima por
Tangaroa y salió. Dando sólo unos pasos,
llegó aquí y preguntó: “Tangaroa, ¿dónde estás?”. No hubo contestación.
El Gigante volvió a Hiva,
llorando por Tangaroa; su hermano.
Un día llegó una foca aquí y bajó
a tierra en Hanga iti.
Una mujer despertó en la mañana y
salió para hacer su curanto. Bajó
al mar, lavó su canasto taropa y lo estrujó para que saliera lo sucio.
Al ver en este momento una foca
tendida en la playa, volvió arriba y dijo a su marido: “Padre, hay una foca
tendida en la playa”.
El marido llamó a otros hombres y
ellos vinieron.
La foca estaba durmiendo y ellos
le pusieron un cordel alrededor y la amarraron a una roca.
Tangaroa despertó con sobresalto.
Viendo hombres que le pegaban con palos, Tangaroa gritó: “Soy un Ariki,
soy Tangaroa, dejadme!”.
No hicieron caso esos hombres que
mataban a Tangaroa. Le gritaban: “¡foca
mentirosa!”.
Después de matar la foca la
cortaron en pedazos para cocerla en curanto, pero no se coció bien; a la
bahía de Hanga iti le pusieron el nombre de “Bahía de Tangaroa rojo”.
Mandaron un pedazo a la gente de
la región de Hanga Hoonu (La Pérouse).
Ellos lo recibieron y lo cocieron; no quedó cocido. Pusieron desde entonces el nombre “Re’e”,
a ese lugar.
El León
Marino
(Antigua
Leyenda Pascuense)
(Hugo Alsina
Calderón)
Cuenta la vieja tradición oral de
Isla de Pascua, que hace muchos años llegó a la costa cercana a Hanga Tetenga,
en la parte sur de la isla, un gran león marino, en el que se había reencarnado
el alma del Ariki (rey) Tangaroa.
Al verlo los isleños quisieron
matarlo, pues padecían en esa época de gran hambruna, pero el león les habló y
les dijo que no lo hicieran. Sin
embargo, ellos apremiados por el hambre, lo mataron, lo trozaron y empezaron a
preparar un gran tunu ahí (curanto).
Horas y hora trataron de asar la
carne del león marino y ésta siempre se mantuvo sin cocerse.
Alarmados, los habitantes de la
isla, se llevaron algunos trozos de carne para cocinarlos con más calma en sus
casas, mas todo fue inútil.
Ante el temor de un castigo
llevaron todos los restos de carne y los enterraron en un gran hoyo en Vaitea,
en cuyo lugar nació y creció un gigantesco árbol, existente hasta el día de
hoy.
Aún se conserva también, en la
costa de Hanga Tetenga, un círculo de piedras que marca, según esta leyenda, el
lugar exacto donde se realizó el frustrado curanto.
Glosario
Ko: Yo
Hiva: Mítica tierra o isla de donde habrían provenido los
ancestros de los habitantes de Isla de Pascua.
Curanto: Tipo de comida que se cocina en un hoyo.
Ariki: Rey.
Re’e:
No estar bien cocido, semicrudo.
Nota de la Administradora:
Nuevamente pido un millón de disculpas por la demora en subir esta entrada.
El próximo tema a tratar será el Unicornio,
para que no piensen que me quedo pegada en las sirenas, y pondré mucho empeño
para que no transcurran muchos meses antes de ser subido.
Las próximas entradas serán: un
nuevo premio para mi blog otorgado por Malena del blog
Reinos de Fábula
y la reseña del libro de romance paranormal, de la escritora chilena
Freya Asgard: “Una tarde Especial” (con la que tengo una tremenda deuda y
cargo de conciencia, porque hace muchos meses ya que me regaló su libro para
que lo leyera).
Bueno, eso es todo por hoy,
espero, como siempre, que haya sido de su agrado. Besitos!!! :)
Imagen de Inicio: Mana Anakena de Lorena Mellado: